No me gustaban las visitas, así que les ladraba y como no se enteraban, les mordía. Ahora sé que las visitas vienen a darme premios, juego y mimos.

  • Raza: Bulldog / Yorkshire terrier
  • Edad: 8 meses
  • Problemas: Ladrido, mordida, inseguridad, dominio
  • Soluciones: Ejercicios de autocontrol, potenciación de olfato, refuerzos positivos

Yuki era un auténtico demonio de tasmania, un ciclón de ladridos e incluso a veces, mordidas. Su nerviosismo era pleno cuando venían visitas y no podía ni escucharte de la constancia de su ladrido.
Con estructura, aumento de su seguridad mediante ejercicios y visitas constantes Yuki se ha vuelto muchísimo más sociable y aunque algunas veces recae en sus bucles, ahora la familia tiene herramientas para pararle y transmitirle seguridad.